Existe una iglesia en Zacatecas que fue destruida durante la revolución mexicana y que fue parcialmente reconstruida, excepto los detalles de la fachada, pues según los eruditos era la máxima expresión de arte barroco churrigueresco de Latinoamérica, difícil reconstruirla.
Sin embargo han producido un audiovisual que se proyecta sobre la fachada blanca de la Iglesia, un compendio de la historia de México, intercalados con las etapas de construcción y destrucción de la Iglesia, misma que después de la revolución sirvió como salón de Baile, templo protestante, sede de los masones y viviendas populares. El audiovisual culmina con una aproximación de cómo sería originalmente la Iglesia de San Agustín.
La realización es espectacular y es una buena metáfora de la ciudad que pudo reconstruirse después de una cruenta revolución, y de los zacatecanos mismos que nacidos en el semidesierto hemos echado mano de nuestro ingenio y de nuestro esfuerzo para renacer siempre que esto sea necesario.
Me ha gustado estar terminando este viaje con la “Iglesia Fénix”.
Mientras miraba las imágenes y escuchaba los sonidos en la espectacular plaza, hacía un recuento de los agradables encuentros que he tenido con mis amigos aquí, me ha quedado una ligera congoja porque siempre me falta tiempo para encontrarme con otros tantos, y podía resumir mi percepción de la gente con la que me he encontrado: NOBLEZA Y VITALIDAD, sin duda están llenos de vida, desde aquel amigo que ha hecho un “Excel” para mejorar incluso su vida espiritual; hasta aquella humilde trabajadora que está buscando como alimentar bien a sus hijos en medio de esta terrible crisis económica.
Como siempre me queda un sentimiento agradable de ser testigo de vidas muy auténticas, hemos sonreído juntos, he aprendido muchas cosas, he tenido un par de encuentros del todo inesperados y que me han marcado profundamente, HE ENCONTRADO MUCHA VIDA, todo ello a pesar de que también he tenido la pena de estar al lado de una entrañable amiga a quien en estos días se le ha muerto un hermano.
Hoy domingo es el último día en Zacatecas, celebraremos el cumpleaños de mi hermano pequeño, queridos amigos, a veces soñamos con la vida, esto es la vida.
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