miércoles, 22 de enero de 2020

JUVENTUD Y MADUREZ

"Los viejos dan buenos consejos, porque no pueden dar malos ejemplos". François de La Rochefoucauld".
Reflexioné en días pasados con amigos sobre la edad y el paso de el tiempo, sigo pensando que la vida es un eco de la infancia y que la juventud es una coronación mágica que se experimenta transitoriamente. Incluso, he llegado a pensar que la vida te da juventud y pocas cosas más.
La paradoja vital es que los exámenes más importantes de la vida son en la juventud, una vez pasada la juventud tu vida es básicamente un despliegue de tus respuestas dadas cuando eres joven... al menos que te propongas seguir siendo joven. Porque la juventud es una conquista: para llegar a ser joven hay que convertirse en un adulto que sabe amar, trabajar y comprometerse; y al mismo tiempo permanecer flexible de mente y de cuerpo, hay personas que murieron sin llegar a ser jóvenes, y hay quienes pasaron de la niñez a la vejez sin pasar por la juventud. Para llegar a ser joven hay que dejar el pensamiento mágico de los niños y asomarse a la magia verdadera que es vivir con arte, hay que dejar de ser el adolescente narcisista y empezar a ser un adulto que se compromete.
A veces también digo que la vejez es una masacre, lo he dicho porque he sido testigo como médico del declive de muchas personas, es una visión sesgada porque con el timepo, me he dado cuenta de que hay muchas personas que han hecho un pacto honrado con su soledad, que han sabido ser adultos, han sabido asentir a su realidad y responder a ella con dignidad: ASUMIR Y RESOLVER. 
En la juventud, la vida te da decenas de licores para elegir, pero no te entrena el gusto, es un arte llegar a la madurez y disfrutar en sorbos conscientes los elixires que son dignos de beber, en la madurez también habrás aprendido a darle sitio a lo que no ha podido ser, a lo que ha quedado fuera de tus elecciones, y sin embargo seguir estando completo.
Podría seguir argumentando, me quedo con la frase de un campesino de mi pueblo: "Bonita chingadera hicimos al envejecer".
LOS AMIGOS, del pintor zacatecano Rafael Coronel.

viernes, 10 de enero de 2020

FÁTIMA Y EPICTETO

Fátima es una mujer humilde que nos ayuda a algunos a mantener nuestra casa limpia, el otro día lloraba amargamente porque unos chicos le robaron su teléfono móvil: unos pobres robándole a otra pobre, intenté consolarla con las palabras de Epicteto, aunque en el fondo, tenía las mismas ganas que tenía ella de darles una paliza. Aquí las palabras de Epicteto (libre adaptación).

Cuando una cosa te es arrebatada, devuélvela con facilidad y de inmediato, agradecido por el tiempo que la tuviste para usarla. Nunca digas "lo perdí", di más bien "lo he devuelto". No te han arrebatado tus propiedades han sido devueltas. Durante la vida recibirás muchas cosas, desde el momento de tu nacimiento, y tendrás que devolverlas todas el día que mueras: las devolverás todas de golpe, no hay mudanzas detrás de las carrozas fúnebres. Puede ser que pienses que quién te ha quitado algo es un mal hombre. Sin embargo, tu no conoces la desgracia de su destino para tener que arrebatar a otros "cosas". ¿A ti qué te importa quién fue el brazo ejecutor -y sus circunstancias- para que devolvieras lo que no era tuyo?, por eso, mientras tengas cosas, cuida de ellas como si le pertenecieran a otro. Usar las cosas y no a las personas, esa es la clave.