Gracias a una tarjeta telefónica supe que el museo Soumaya de la ciudad de México, llevó a cabo una exposición : “El amor hasta la locura: arrebatos eróticos y místicos” y que una vez pasada la exposición se convirtió en libro.
Siempre me ha fascinado el hecho de cómo la carne siente el amor, tanto el erótico como el místico, y es inevitable la confusión al respecto, cuando se miran ciertas obras de arte, v. gr. “El éxtasis de Santa Teresa” de Bernini.
El arrebol que los apasionados cánticos y rezos provocaban en aquellas mujeres piadosas de mi infancia, tenían un tinte amoroso, difícil de discernir si era erótico, místico o ambas cosas a la vez.
El filósofo y poeta Cordobés Ibn Hazm, considera que el amor humano es expresión del amor divino, de tal manera que desde su punto de vista esta confusión semiótica que nos puede provocar un cuadro con ángeles y corazones sangrantes, pinturas donde aparecen místicos en éxtasis casi orgásmicos, etc. serían una polifacética manifestación de un solo amor.
He tenido que hacer la foto directamente de la tarjeta, es decir le he robado una imagen al hombre más rico del mundo, a quien imagino en un delirio místico cada que ve su nombre en la lista de Forbes.
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