Tengo
especial predilección por los escritores que escriben cosas breves y
contundentes: Augusto Monterroso, Kjell Askildsen, Antón Chéjov,
Richard Ford, Leonard Michaels etc. mi favorito es Juan Rulfo siempre
está en mi mesita de noche, con su obra tan breve, con un lenguaje que
tiende más al silencio que a la palabra. Releer sus cuentos es volver a
experimentar el polvo de la llanura, la soledad de los pueblos
abandonados, los monólogos descarnados de sus personajes que no esperan
ser escuchados y que están condenados a repetirse ante la misma
indiferencia. Un discurso narrativo que se construye alrededor del
soliloquio de personajes anónimos, sin nombre y sin tiempo, que
contemplan estáticos y sin afectación la lucha del hombre con su
destino inminente: la fatalidad.
“La gente allí no habla de nada” Juan Rulfo
“La gente allí no habla de nada” Juan Rulfo
FOTO: "Zapato Zacatecano" de Pedro Valtierra
1 comentario:
El ritmo de la escritura de Rulfo pertenece a la poesía: abre silencio y por tanto un lugar para escuchar, debajo de las palabras, lo que las palabras no pueden decir. La gente allí no habla nada. Escucha.
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